LA #TUZOHISTORIA DE VICTORIA ESCAMILLAS.
Yo soy Victoria, tengo 24 años, vivo en la ciudad de Pachuca, Hidalgo y creo que mi historia apoyando al equipo de mis amores quizá empezó un poco tarde. Era una pequeña niña que vivía con sus abuelitos donde miraba el fútbol por la televisión y jamás había ido a un estadio. A la edad de 10 años un hijo de mi abuelita llegó a vivir a la casa, recuerdo muy bien que a él le encantaba jugar fútbol y siempre me decía que quería ser director técnico.
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Una tarde cuando regresaba de la escuela mi tío me dijo que me preparara porque al otro día iríamos al estadio, creo que esa noche no dormí de la emoción porque por primera vez miraría un partido en vivo. Fue un febrero del 2002, era un Pachuca vs Cruz azul, fuimos a ese partido porque mi tío toda su vida ha apoyado al Cruz Azul. Aún no tenía un equipo favorito ni sabía que realmente iba a descubrir ese día, pero desde que llegamos me impresioné mucho, me contagié con la emoción de la gente al apoyar a su equipo, al entrar al estadio fue lo más memorable; era mejor de lo que me lo había imaginado y desde ese momento entendí que ahí era donde quería estar siempre apoyando a los “Tuzos” del Pachuca.
Después de eso me encantaba mirar el fútbol, me encantaba aprender más y más, siempre llegábamos 2 horas antes del partido al estadio, y ahí mi tío me explicaba que era un fuera de lugar, como se debían cobrar las faltas o porque se marcaban penales. Llegó el apertura 2003 y nuestros Tuzos llegarían a la final contra Tigres, con un marcador global de 3-2 donde por tercera ocasión el Pachuca de coronaba campeón, una final que miré por televisión, pero no fue hasta el año 2006 donde volveríamos a una final contra el San Luis la primera final de liguilla en el estadio Hidalgo, recuerdo que hicimos fila por muchas horas para conseguir boletos, vivir esa final fue algo muy especial en mi vida porque era la primera que sentía de cerca, y que aunque se ganó por la mínima y desde los 11 pasos, yo grité y celebré ese campeonato como nunca.
Otro campeonato que recuerdo muy bien fue la Superliga, ese marcó algo importante para mí porque tuve la fortuna de asistir al estadio del LA Galaxy en California, y más aún estar atrás de la portaría donde se tiraron los penales, en el momento en que Miguel Calero paró el disparo de Landon Donovan.
Pero como todo en la vida no es felicidad, uno de los momentos más tristes que he vivido con mi equipo fue en la final del León en el estadio Hidalgo, recuerdo que nadie de mi familia quería ir conmigo y en ese entonces mi novio tenía un pie fracturado, así que decidí que iría sola, era una locura en mi casa; ¿Cómo me iría sola a la final del torneo?, después de tanto si termine por ir, pero ya todos sabemos el desenlace, ya que esa final la perdió nuestro equipo.
Puedo decir que a pesar de no vivir muchos momentos de gloria con mi equipo y de no conocer a todas las estrellas que pasaron por los tuzos, para mí los jugadores que han marcado mi corazón sin duda alguna “El Eterno”Gabriel Caballero, era un magnífico líder y ser humano dentro y fuera de la cancha, “El Cóndor” Miguel Calero, sin duda un icono de los tuzos, me encantaba su fortaleza y empuje para el equipo, El Chaco Giménez; que debo confesar era el amor de mi vida junto con Damián Álvarez. Actualmente mis jugadores favoritos son el “Rayo” Jonathan Urretaviscaya, Franco Jara y nuestro capitán Erick Gutiérrez.
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A lo largo de estos casi 15 años en los que he apoyado incondicional al equipo de mis amores, me siento muy afortunada y orgullosa de pertenecer a esta familia tuza, donde he vivido muchas emociones, desilusiones y más, porque para mí ir al estadio es olvidarme de todos mis problemas y estrés que tengo, el fútbol en general te enseña muchas cosas, a ser humilde, a luchar por lo que quieres, ganar, a sentir esa adrenalina de gritar el gol hasta quedarte sin garganta, y como alguna vez escuche una frase: “Prefiero llorar contigo, que celebrar con otros”.